“EL MISTERIO DE LA GIOCONDA”
La famosa “Mona Lisa” se le llama así pues la retratada tiene una expresión ambigua y fue pintada hace más de 500 por el increíble Leonardo Da Vinci. La leyenda dice que le gustó tanto que nunca la entregó y se quedó con la obra para su deleite. Esta obra es de las más reconocidas por todo el mundo sin embargo la historia que hay detrás de ella es emblemática.
“La Gioconda” más conocida como la “Mona Lisa” es una pintura en donde vemos el retrato de una mujer aburrida con mirada enigmática con una gama de colores cafés y un fondo peculiar. Dicha obra fue robada del Museo de Louvre en 1911 por Vincenzo Peruggia, quien era un empleado del museo. La obra fue recuperada dos años después cuando intentó venderla. Al volver a Francia fue tanto el furor por querer verla que se piensa que fue aquí donde se hizo famosa. Pero no es así.
Da Vinci en vida era considerado un gran maestro y todo sus conocimientos como sus obras eran admirados por todo Europa, con dicha fama gozo de gran libertad para poder potencializar sus ideas, los grandes jefes de Estado pagaban fortunas para tenerlo cerca ya que generaba un nivel de status, pues el que compartiera sus obras, tanto de ingenieria, arquitectura o artisticas, eran solo para la elite.
Sin embargo vayamos al famoso cuadro. Da Vinci pintó 4 retratos parecidos entre sí. El primero es el Retrato de “Ginevra de´Benci”, luego podemos gozar de la “Dama con armiño”, “La Belle Ferroniére” es la tercera, para terminar con la Gioconda. Todas están pintadas con la emblemática técnica del “Sfumato” inventada por el maestro. Las tres primeras son obras con grandes técnicas que se fueron perfeccionando para llegar el refinamiento de la última, pues es la conclusión de un estudio de la perspectiva, la luz y la composicion. La grandeza de “La Gioconda” radica en que Leonardo logró reunir todas sus técnicas en un solo cuadro.
Pero conozcamos la historia del retrato más famoso. Por el año 1500 Leonardo regresa a Florencia y el mercader Francesco del Giocondo le pide que retrate a su esposa Lisa Gherardini, sin embargo no es la obra que nosotros conocemos, Pues el gran historiador del arte Giorgio Vasari describe la obra con cejas y la del Louvre no tiene. También se comenta que fue un encargo que nunca se entregó pues que se encaprichó con la obra que decidió quedársela. Sin embargo, que mercader paga un encargo y que no se le da pues en los archivos de Da Vinci está escrito que Francesco al no verla terminada va a su taller y se lleva el retrato sin acabar, pero no se llevó la obra que está en Francia sino la llamada “Mona Lisa de Isleworth” y se pensaba que está era una supuesta copia, pero los análisis que se le están haciendo le dan la vuelta a la historia porque se está empezando a conocer como la primera versión de la Mona Lisa.
El primer dueño de la Gioconda fue Francisco I de Francia después pasó a la colección real de Luis XIV,y Napoleón Bonarparte la tuvo en su gabinete privado ya que le fascinaba. Y se consideraba como la única pintada por Leonardo. Pero al estudiar la Mona Lisa de Isleworth, llamada así por se el lugar donde estaba resguardada, nos dicen los expertos que fue pintada en entre 1503 y 1506 y se le atribuye que fue pintada por la mano de Da Vinci y la versión francesa se empezó a pintar en 1516.
Hoy estamos frente a una gran controversia pues entre más se estudia la obra, sus enigmas son mayores y más interés nos genera.
Lo que sí no podemos cuestionar es la grandeza de Leonardo.
Te invito a que busques las distintas versiones y nos cuentes cuál es tu favorita.